- Área: 105 m²
- Año: 2016
-
Fotografías:Lara Briz, Patricia Báscones
Descripción enviada por el equipo del proyecto. En Tanzania, construir con tierra representa el pasado y está asociado con malas condiciones de vida. Los materiales y técnicas tradicionales adaptados al medio ambiente se abandonan a favor de la importación de materiales y productos costosos y, en ocasiones, ineficientes desde el punto de vista energético, como bloques de hormigón, de los que solo se benefician los fabricantes de las economías más avanzadas. El proyecto tiene como objetivo recuperar la tierra como un material de construcción moderno y sostenible, utilizando artesanía tradicional y métodos simples, para continuar la tradición de la construcción rural local. También alienta la participación local e internacional y puede servir de ejemplo para futuros desarrollos de edificios para mejorar la calidad de la vivienda rural de Tanzania.
La arquitectura de la biblioteca Amani ofrece diferentes tipos de espacios y usos para promover un enfoque diferente de la lectura y el aprendizaje, como una alternativa al enfoque frontal típico de las lecciones. Encerrado por gruesas paredes de tierra y con acceso desde la escuela, hay una sala multidisciplinaria para reuniones de talleres y clases. La sala de lectura es liviana y abierta con una de las fachadas conectadas al balcón, creando un gran espacio para la recreación y el movimiento.
El proyecto se construye principalmente utilizando dos materiales: la tierra excavada en el sitio y la madera recolectada localmente. La producción en el sitio ofreció la posibilidad de emplear material local y el mismo suelo excavado para la construcción de muros. El perímetro de la biblioteca está construido con muros de carga utilizando la técnica de tierra apisonada. Además de su capacidad estructural, la tierra regula la humedad y la temperatura interior, ahorra energía y reduce la contaminación ambiental. Además, es reutilizable y ahorra gastos en material de adquisición y transporte. La artesanía local se puede encontrar, entre otros, en las puertas de ciprés y el recinto de bambú en la terraza, como una forma de promover y fortalecer la participación de los artesanos locales, así como de concienciar sobre el valor del patrimonio cultural.
La construcción de la Biblioteca Amani se llevó a cabo en un corto período de tiempo de cuatro meses a través de un taller de habitantes de Kibaoni y participantes internacionales. El taller fue considerado como una experiencia de aprendizaje a través de un proyecto de diseño-construcción inmersivo y colaborativo. El enfoque tiene un carácter de desarrollo, actuando como "semilla", ya que busca formar una base de conocimiento que pueda contribuir al retorno potencial de materiales y técnicas tradicionales para resolver el problema de la vivienda de bajo costo en entornos rurales.
